Tu bienestar inicia aquí
Agenda tu cita con Iván Ramírez Calderón terapeuta
Recuerda que puedes agendar tu sesión presencial para los días lunes, martes y viernes en la tarde. Las sesiones virtuales están disponibles los días lunes, miércoles, jueves y viernes en la mañana En ambos casos, el formato del proceso permite que atiendas tus necesidades y encuentres soluciones.
PREGUNTAS FRECUENTES
Cualquier persona puede beneficiarse de ir a psicoterapia siguiendo un interés, motivación o búsqueda personal en cualquier momento, ya que la intención global es aprender a transitar las situaciones de vida construyendo bienestar e integrando la libertad de tomar decisiones y la fuerza para crecer y existir. Cuando la situación es percibida como reiterativa y en ello hay bloqueos en las formas de ser así como malestar psicológico, es necesario y muy recomendable atenderse e ir a psicoterapia.
La terapia es un escenario de encuentro contigo mismo y con otro (el terapeuta), en el que exploras, expresas, te apropias de tus realidades, haces consciencia del sentido y de la fuente de los problemas, generas autoapoyo y bases seguras para vincularte con tus rabias, miedos y situaciones inconclusas aprendiendo a procesarlas, de tal manera que en esa experiencia creas, creces, resuelves, te apropias de tus recursos personales y construyes tu vida más saludablemente.
Junto a una resistencia natural a reconocer el malestar psicológico o ha atenderlo, están las necesidades cada vez más notorias e ineludibles de que hay algo en la vida y en la vivencia personal que no encaja. Atender esas necesidades es uno de los principales motores que impulsan a involucrarte en un proceso psicoterapéutico. Igualmente, en la medida en que se desarrollan los encuentros vas apropiándote de aquello que quieres atender, lo cual también es una motivación muy fuerte en la que encuentras lo necesario para actuar y resolver.
Depende de los objetivos que se definan, así como de tus necesidades y cómo vas encontrando lo que estás buscando, tanto para tu bienestar como para tu crecimiento y tu sentido de realización personal. En cualquier caso, el tema siempre está abierto y lo puedes revisar en cualquier momento conmigo. Muchos procesos son breves y muchos otros también se extienden tanto como la persona quiere crecer, siempre en el contexto de alentar a que cada quien salga a vivir su vida por su propia cuenta.
Algunas personas prefieren las sesiones presenciales por su propio estilo o necesidad personal. Otras personas prefieren las sesiones virtuales por la enorme ventaja que tienen a la hora de ajustar horarios y desplazamientos. Es posible que por momentos en una sesión presencial el vínculo entre personas (consultantes y terapeuta) se sienta más natural, mientras que en la virtualidad la cualidad del vínculo es la misma solo que es a través de una pantalla; de cualquier forma, la experiencia me dice que no hay diferencia significativa entre la virtualidad y la presencialidad, y para aquellos que usan la virtualidad siempre encuentro que es mucho mayor el beneficio que el “costo” de vincularse a través de una pantalla. De mi parte, me siento cómodo y en confianza en cualquiera de los dos recursos y tengo experiencia en ambos casos.
Ubícate en un lugar en el que te sientas cómodo/a, seguro/a y confiado de poder expresarte, teniendo en cuenta que la sesión dura una hora. Este tiempo es un tiempo que te das a ti. En lo posible para conectarte y ver la pantalla utiliza preferiblemente un computador. Esto te permite tener las manos libres y mayor facilidad al expresarte. Por último, en ocasiones se presentan fallos en la conexión y/o en la imagen o el audio. Para esas situaciones, al iniciar el proceso hablamos sobre medios de comunicación alternos en caso de que haya una falla repentina de internet.
Es de gran ayuda tener presente y dimensionar el hecho de que te estás dando algo que necesitas y buscas para tu bienestar, más allá de que a veces, como es natural, sientas resistencia a asistir. Dimensionar esto te ayuda a sacar el tiempo suficiente para tus desplazamientos y a disponer del tiempo y la energía para atenderte. No es mucho más lo que necesitas.
En las primeras sesiones ajustamos las formas de pago según lo disponible. Generalmente son a través de transferencia bancaria o efectivo una vez termina la sesión. También está la posibilidad de hacer los pagos mensualmente para mayor comodidad en las transferencias.
El consultorio está ubicado en Bogotá sobre la autopista norte, sentido sur norte, al lado del CAI de Navarra, entre las estaciones calle 106 y Pepe Sierra de Transmilenio.